22 mar 2010

Quiero entenderlo.

Quiero entenderlo. Quiero entender por qué la gente actúa como actúa. ¿Por qué hacer lo que todos hacen? ¿Por qué hacer lo que está prohibido por nuestro bien? ¿Qué necesidad hay de pillarse una borrachera cada noche que se sale a riesgo de pasarse y no pasarlo bien, o fumarse un porro antes de clase sabiendo que está mal y que a la gente que te quiere le molesta? No lo entiendo.

¿Estáis tan vacíos por dentro para realmente necesitarlo? Me enorgullezco de poder decir que para pasarlo bien solo necesito estar rodeada de la gente que quiero, ni garitos guays, ni alcohol, ni nada. Sólo necesito a mis amigos, a gente que me entiende, que me de una conversación inteligente, que me escuche, a mi novio...nada más.

¿Será que se es más guay por hacer esas cosas "prohibidas"? Quizás es la percepción de mucha de la juventud actual, pero ¿por qué? ¿Tan guay es acabar vomitando, que el profesor te expulse por molestar y ponerte gallito? Sinceramente, y me da igual lo que se piense de mí por ello, lo considero patético. Me parece patético que entre gente de 18 años y supuestamente con una madurez intelectual que debería ser suficiente para votar (y con ello contribuir a elegir el futuro del país en el que vivimos), conducir y otras muchas cosas haya gente que se crea que por hacer el ridículo de esa forma es más "guay".

Me da igual que me llamen niñata por enfadarme por cosas como estas, pero tengo muy claros mis principios y (intento) soy consecuente con lo que digo. Lo avisé, una y otra vez, me enfadé y te perdoné porque creía que realmente valía la pena hacerlo. Pero toda esa confianza la has perdido siendo una hipócrita, creyéndote lo más maduro y lo más inteligente y luego hacer las cosas sin pensar, sin poder justificar tus actos, sabiendo que esto pasaría y que lo que hiciste estuvo mal. Esperaba de ti una madurez que no tienes por mucho que quieras fingir que sí. Si no sabes por qué sigo enfadada pregúntate cómo ha sido tu actitud desde entonces. Cosas como "no sé por qué estás enfadada" o "bueno, pues cuando quieras hablarme me hablas" me demuestra que ni sientes realmente el haberme fallado, como amiga y como referencia que tenía, ni entiendes por qué me ha decepcionado tu comportamiento.

Me da igual que lo consideres una niñería y que justifiques todo con un "no puedo cambiar lo que hice". Las cosas no son así, la confianza no se recupera con la labia que te sobra para engatusar a todos, la confianza se recupera con hechos. Y el hecho de que en plena semana de exámenes prefieras salir todos los días, pillarte un ciego del quince, faltar al concierto de un amigo por tomar algo con tu novio (que podías hacerlo ahí también) y no toques un libro, me demuestra que lo del otro día no fue un hecho aislado.

Lo mismo ocurre con tus continuas faltas de respeto a quien no piensa como tú. Has cambiado y para mal. Has cambiado y yo ya no te reconozco. Y lo dije, dije que no quiero andar con gente que no me convence como persona. Y tú has dejado de hacerlo hace mucho, y ahora has perdido la confianza que tenía en ti también. Te lo pasaba porque eras mi amiga y confiaba en ti. Ahora no.

Si algún día lees esto y te das cuenta de que va por ti, reflexiona sobre lo que vas a hacer con tu vida. Por que en el fondo, haces lo mismo que toda esa gente que es "inferior" a ti (o que al menos tú consideras así). Haces lo mismo que "esos niñatos de clase que te chupan un puto pié". Igual ahora la que "necesita un buen par de hostias" eres tú, para despertar, para que veas lo que fuiste y lo que eres. Y no seré yo quien te las dé, cada uno con su vida que haga lo que quiera. Será ésta misma la que te las dé. Tiempo al tiempo.

1 comentario: